Mi nombre es Ruth, soy de Mallorca, pero Donostiarra y Hendayesa de acogida desde hace 7 años y soy feliz.
En Mallorca trabajaba para el ayuntamiento de Palma en una empresa donde daba clases de informática a niños, a 3ª edad, a personas analfabetas digitales y a mujeres en riesgo de exclusión social cursos de diseño, pues soy diseñadora y editora de arte de profesión. Hubo un Ere y nos echaron a muchos.
Por otro lado, al cabo de un año a mi exmarido, mi marido en aquel entonces, le trasladaban a Guipúzcoa y optamos por trasladarnos a vivir a Francia para que mis niñas aprendieran francés y así lo hicimos. Si te digo la verdad, no tenía ni idea de que se hablara tanto el español por la frontera. Aún y todo para temas burocráticos, había que resolverlo en francés, yo no tenía ni idea... pero me apunté a Francés y ahora puedo decir que entiendo algo y puedo mantener una conversación.
Mis niñas, actualmente adolescentes, pues cuando vinimos tenían 9 años, hablan francés perfectamente y con eso me quedo...
Todo este tiempo me he dedicado a mis hijas, a aprender francés y yoga entre otras cosas.
¿Cómo se te ocurrió emprender? ¿Cómo ha sido el proceso?
Hace tres años mi exmarido y yo decidimos divorciarnos y obviamente debía de reinventarme o buscar algún trabajo. No quería volverme a Mallorca, pese a tenerlo más fácil allá, pues al hablar catalán y mi experiencia en empresas públicas no habría tenido problema por encontrar trabajo, además de tener a toda mi familia allí, por lo que emocionalmente me habría sentido más apoyada. Pero mis hijas tenían sus amigos, toda su formación en Francia y tampoco quería separarlas de su padre.
En ese impás empecé a dar clases de yoga, lo que me hizo recapacitar y replantearme la vida. Daba clases en diferentes asociaciones en Irún pero nada serio hasta que apareció la pandemia y decidí seguir dando las clases de manera abierta y online. Investigué un poco y vi que la cámara de comercio realizaba cursos para emprendedoras y me recomendaron entrar en el programa EMEKIN, al que estaré agradecida eternamente. Económicamente, no disponía de ingresos pero sí las ganas de crear algo bonito, que me llenara. Estaba un poco desesperada por empezar cuanto antes para poder remontar de manera rápida. Me planteé, incluso, crear un proyecto de páginas web de momento, para poder salir de mi crisis.
En Emekin me recondujeron y efectivamente lo vi claro. Y así decidí crear mi proyecto de yoga.
Por otro lado, al ser diseñadora gráfica, editora de arte y también artista, pues pinto, mi lado creativo es parte de mi motor para crear cualquier tipo de idea enfocándome en el proyecto. Creé unas esterillas diseñadas por mi, calidad top, equiparables a una marca que se llama Liforme. Estas esterillas están basadas en un cuadro que pinté que se llama “Madre Tierra” y realicé el diseño de manera gráfica y lineal simplificada en línea oro. Lo vi tan claro que registré la marca y junto con la impartición de clases online, empecé a vender las esterillas en mi página web que creé también con ayuda y obviamente con ayudas económicas de mis familiares. Justo en la entrada de Emekin firmé el divorcio y acordé con mi exmarido que viviría este año que queda hasta el verano de 2022 en Hendaye el tiempo que me tocara estar con mis hijas, por lo tanto me muevo de Donosti a Hendaya. Así que se puede decir que en plena pandemia, divorcio y mi crisis económica- existencial estoy creando mi pequeño negocio.
Hace 4 meses decidí que debía empezar fuerte, así que busqué un local que no fuera muy caro en el centro de Gros. Con mis pequeños ahorros estoy invirtiendo en lo que espero sea mi sustento. Cuando cogí mi local estaba un poco despeinado así que yo misma me puse el mono de pintora, le di un cambio de look en el que estuve trabajando un mes y medio duramente, con algo de ayuda. Ahora tengo un estudio creado con amor, desde el amor. Solo me falta que me conozcan pues al no ser de la zona no tengo demasiados contactos.
¿Qué tipo de servicios podemos encontrar?
Doy clases de Hatha Vinyasa y meditación, de una hora y también, exprés sin estrés de 30 min, enfocado a gente con poco tiempo, o que quiere algo rápido y eficaz. Para estas dos opciones hay la posibilidad de venir con tu cuadrilla y sale más económico. Son bonos friends y se aplican a Yex ( yoga exprés) y a Basic.
He ido realizando clases gratuitas en la playa de Basic y Yex porque clases de yoga al aire libre y en plena naturaleza es una gran ayuda para entrar en un@ mism@.
Por otro lado, doy yoga terapéutico para grupos e individuales donde nos centramos en la patología del alumno/a y realizamos clases especiales.
También está la opción de yoga sabios que es para mayores de 60 años, con clases adaptadas a senior.
Y por último clases de yoga para jóvenes o adolescentes, de entre 13 y 19 años.
Mi intención es dar meditación con mantras una o dos veces al mes los sábados. También me encantaría crear talleres de productos naturales y talleres de espiritual art.
En estos momentos no pinto mucho porque necesito que salga adelante el negocio para cubrir necesidades, pero en breve retomaré esta pasión que adoro. Algunos de mis cuadros están en el salón de yoga. Ahora invierto toda mi energía en las clases de yoga pues supongo que a medida que me vaya conociendo la gente las esterillas no pasarán tan desapercibidas.
Te dejo todos los links de las redes por las que me muevo, mi dirección del estudio, la página web y el teléfono.
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