Disponemos de una auténtica farmacia natural a nuestro alcance y no somos conscientes de ello. Nuestros mayores son poseedores de toda esa sabiduría, además de tener una intuición mucho más viva y abierta a todo ello.
Romina, Cuéntanos cómo te introdujiste en este mundo
Estudié Naturopatía y luego me especialicé en Fitoterapia con grandes maestros como Gabriel Vázquez Molina o Clara Castellotti entre otros. Mi forma de vivirlo, más que en un negocio, pretende centrarse en impulsar una pasión por todo lo que las plantas medicinales aportan. La constatación de que todo ese legado de sabiduría de nuestros antepasados se estaba perdiendo me hizo sentir una necesidad de recogerlo, transmitirlo y experimentar con ello.
Disponemos de una auténtica farmacia natural a nuestro alcance y no somos conscientes de ello. Nuestros mayores son poseedores de toda esa sabiduría, además de tener una intuición mucho más viva y abierta a todo ello. Ver que todo eso se perdía y querer recuperarlo fue el verdadero origen de todo.
Hablas de un legado familiar...
Si, bueno, yo diría más bien un legado de nuuestros antepasados en general. Mi familia es originaria de una zona muy rural en la montaña, y, como en muchas otras zonas rurales, antes no tenían un fácil acceso al médico, por distancia, orografía, etc. Por ello utilizaban los recursos naturales que tenían a mano. Nuestros mayores se limpiaban los ojos dañados con manzanilla, los dientes frotándose hojas de salvia, o se curaban heridas o golpes con ungüentos a base de plantas entre un sinfín de remedios y brebajes para todo tipo de enfermedades o afecciones de la piel.
Me impliqué, aprendí de ellos y poco a poco, empezó a hacerse realidad. Fui experimentando mis conocimientos adquiridos con familiares y amigos, y cada vez más gente “de fuera” de mi círculo me pedía remedios o productos para sus afecciones o dolencias. Esto derivó en darle forma a todo ello y nació Amana Natural.
¿Qué es Amana Natural? ¿Qué persigue?
Nuestras montañas están repletas de plantas medicinales como la verbena, menta, manzanilla, pasmo belarra, ortiga, rosa mosqueta, malva, orégano y muchísimas más con multitud de propiedades beneficiosas. Asimismo, en la huerta tengo plantadas muchas de las plantas que utilizo, como la caléndula, lavanda, melisa, tomillo, romero, ruda o hierbaluisa, y muchas otras las recojo del monte.
Con todo lo recogido hago las elaboraciones, a través de un proceso totalmente artesanal y realizado por mí misma, en producciones a pequeña escala. Los productos son muy diversos, muy basados en mi propia evolución y en las necesidades de las personas que acuden a mí. Amana Natural ofrece desde aceites cicatrizantes, regeneradores, circulatorios, antialérgicos, relajantes, pomadas para quemaduras, heridas, cicatrices o dolores reumáticos. También cremas de cosmética, emulsiones, geles, tónicos, bálsamos labiales, exfoliantes o desodorantes.
Persigo y ofrezco ser coherente. A a nivel global cubre una necesidad de conciencia medioambiental, de ayuda al planeta y de sostenibilidad, además de evitar que se pierda esa sabiduría de nuestros antepasados. A nivel individual, ayuda a una vida más saludable. No tiene ningún sentido llevar una alimentación super sana y cuidar el cuerpo y luego hidratarnos con una crema llena de químicos, ya que a través de la absorción de la piel un porcentaje considerable del producto va directamente al torrente sanguíneo.
Romina, se habla mucho de la cosmética natural, ¿es una moda?
La cosmética natural y la alimentación van de la mano para quien quiere cuidarse de forma natural. Si nos fijamos, cada vez hay más intolerancias entre la población, tanto en la piel como con la alimentación, y es debido a todos los químicos que ingerimos. Luego para mi, más que una moda es una necesidad de la sociedad actual.
¿Cuál es la esencia de Amana Natural?
Uso principalmente plantas autóctonas, ya que creo que cada uno está vinculado al lugar de origen, y también hay un componente energético en las plantas que es importante en el proceso de recogida y elaboración.
Además, a pesar de tener productos más comunes o estandarizados, no tiendo a usar fórmulas fijas, sino que en base a la necesidad de la persona y digamos también una parte intuitiva, puedo modificar algún componente en una formulación.
¿Cómo ves tu futuro?
Esta es una pregunta complicada, ya que en mi cabeza siempre corretean un montón de ideas, pero me gustaría enfocar este proyecto más que en la elaboración de productos en la transmisión de mis conocimientos, para que quien quiera pueda realizar con los ingredientes que tenemos alrededor sus propios productos, que al final es el origen de todo.
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